El fútbol del Este europeo

Las competiciones europeas de fútbol se crean en plena guerra fría entre la OTAN y el Pacto de Varsovia, por lo cual es muy dificil la participación de  los equipos del Este. Y más difícil que lleguen lejos en la competición. Los arbitros occidentales al servicio de la nefasta UEFA actúan como apendices de la OTAN.

La competición más prestigiosa - la Copa de Europa de Campeones de Liga - se funda en 1956. La Copa de Ciudades en Feria en 1957. La llamada Recopa , Campeonato de Europa de campeones de Copa, en 1961.

Curiosamente son equipos españoles los que acaparan los primeros torneos europeos: Real Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza y Atlético de Madrid. El pacto de la dictadura de Franco con las democracias occidentales de la OTAN, auspiciado por el general Eisenhower, presidente de los Estados Unidos de América, nos da la explicación de estos éxitos. Y por supuesto la autoexclusión de Inglaterra, primera potencia del fútbol europeo. Rusia, la antigua Unión Soviética, Yugoslavia, Hungría y Checoslovaquia, son las grandes potencias futbolísticas del Este europeo. El primer equipo que disputa una final es, en el año 1962, el Dynamo de Zagreb. Los croatas disputan la final de la Copa de Ferias al Valencia y son derrrotados 2-1 y 2-0. (Entonces la final era a doble encuentro). En 1964 un equipo húngaro, (como puede fácilmente deducirse son representantes de naciones más críticas con el pacto de Varsovia los que pintan en Europa), el Ferencvaros, se proclama campeón de la Copa de Ferias al  derrotar por 1-0 a la Juventus de Turín, la Vecchia Signora. Ese mismo año otro equipo húngaro, el MTK de Budapest, disputa la final de la Recopa al Sporting de Lisboa, que derrota a los húngaros tras empatar 3-3 en el primer partido.

En estos años destacan en Europa equipos como el mencionado Dynamo de Zagreb, los húngaros del Ferencvaros y el Ujpest, los eslovacos del Slovan de Bratislava y los rusos del Dinamo de Moscú y el de Kiev - hoy Ucrania.

A finales de los años 60 y hasta bien entrados los 80 arrasan los clubs ingleses, pero ésta es otra historia.

El primer equipo del Este que se proclama campeón de Europa, la hoy llamada Champions League, fue el rumano Steaua de Bucarest, que ganó por penaltis al Barcelona. Se da la circunstancia antes apuntada, que la Rumania de Ceacescu era de los paises más críticos con el dominio soviético y que el líder rujmano apoyaba la vía eurocomunista del español Santiago Carrillo, el italiano Enrico Berlinguer y el francés Georges Marchais.

Resaltar que tras la caída de la Unión Soviética, sólo tres equipos han ganado en competición europea; los rusos del CSKA de Moscú y el Zenith de Leningrado y el ucranio Shaktar Donesz, en la antigua Copa de Ferias, hoy llamada League Europa.

Por último recordar a grandes jugadores del Este de Europa, como el húngaro Albert, finísimo interior izquierda. Los nacionalizados españoles Kubala, Puskas, Kocsis y Czibor. Rusos como el genial Yashine, la araña negra. Boronin, medio centro. Shislenko, magnífico extremo, como el gran Blokhine. Checos como Masopust y Pluskal. Yugoslavos como el genial guadameta Pantelik y delanteros como Dzajiz o Tacka. Sin olvidar al muy atlético Milinko Pantik.

Equipos del este de Europa que dejaron huella entre los aficionados son Lokomotiv y Spartak de Moscú. Partizan y Estrella Roja de Belgrado. Sparta y Dukla de Praga y la Vojvodina de Novi-Sad.

En fin, un fútbol, el del Este europeo, basado en la nobleza, el juego limpio, el ataque, el toque, la elegancia, la inteligencia, la genialidad y la finura. Un fútbol al que avatares al margen del deporte impidieron que triunfase como Europa y el mundo  merecían.